Chenrezig, también conocido como avalokitesvara, es el bodhisattva más venerado que incorpora la compasión de todos los budas. Él escucha incansablemente las oraciones de todos los seres en tiempos de dificultad. En una conocida historia budista, promete liberar a todos los seres sensibles del sufrimiento, incluso si eso significa destrozar sus brazos a muchos para alcanzar a los necesitados. Chenrezig a menudo se representa con once cabezas y mil brazos, y está asociado con el mantra "Om Mani Padme Hum". El Dalai Lama se considera una encarnación de Chenrezig. La compasión y el amor hacia los demás nos recuerdan nuestra conexión con él. Sus gestos y artículos simbólicos, como el Crystal Akshamala y el loto blanco, representan su misión de llevar a los seres del sufrimiento a la iluminación. Como bodhisattva, ayuda desinteresadamente a los demás en su camino hacia la iluminación.